¿Por qué Hawaii?
Kona, la ciudad de la isla de Hawaii es uno de los destinos más deseados para los amantes del triatlón, no solo para los estadounidenses o japoneses, sino para los del todo el mundo. Y esto es, seguramente, por dos razones: la principal, por ser el origen del triatlón y la sede del Campeonato del Mundo de IRONMAN en la actualidad; y la segunda, por la belleza de todas sus islas.
IRONMAN ya suele montar un espectáculo en cada triatlón que organiza, pero el de Hawaii es el más bestia, tanto desde la perspectiva del competidor como desde la del acompañante. Y además, en un entorno muy peculiar y a la vez espectacular.
Seguro que hay muchas guías de viajes con información sobre “qué ver, donde comer o como desplazarse”, pero cuando Uri y yo estábamos preparando el viaje o aconsejando a mis deportistas que iban a competir, encontramos poca información, y nos guiamos por las experiencias de otros triatletas. Así que en este post vamos a dejar algunos consejos, que esperemos que sean de ayuda, si estáis pensando en ir allí.
Clasificación – SLOT
En el caso de los grupos de edad (GGEE): si se quiere ir allí y aún no se tiene el “slot”, primero se debe seleccionar un IROMAN donde repartan plazas, luego toca entrenar fuerte y una vez allí, competir lo mejor posible.
Escoger el IRONMAN
La recomendación es seleccionarlo según las preferencias y la disponibilidad del deportista para entrenar o la configuración de sus vacaciones para ir a competir, aunque cabe decir que competir en Europa suele requerir más nivel que hacerlo en otros continentes. Luego se debe tener en cuenta en qué temporada se quiere competir en Hawaii, porque si uno se clasifica en julio, en octubre deberá volver a competir además de preparar el viaje en poco tiempo, aumentando así el coste y disminuyendo disponibilidades. Cuanto más tiempo de separación, seguro que mejor.
Plazas
En la información de la competición se puede saber el número total de slots que se repartirán, en la mayoría se reparten 40, pero hasta el día después de la competición no se sabrá con exactitud los slots que habrá para cada GGEE, ya que va en relación con los triatletas finalizados en cada uno de ellos. De todas maneras, si eres mujer, o de un GGEE de los extremos (jóvenes o más mayores), suelen repartir uno.
En mi opinión, aunque sea proporcionado y justo, es más difícil conseguir la plaza cuando solo hay un hueco ya que siempre hay algún/a profesional o élite que se pasa a GGEE (por la dificultad que les supone ir como PRO) y si solo hay un slot, está algo más crudo que si hay cuatro o cinco. Aunque se cruce la meta en 2ª posición y creas que hay uno, o la cruces en la 10ª posición y creas que hay 5, siempre se debe ir a la ceremonia de premios y al reparto de plazas, por si los que están delante ya están clasificados o rechazan la inscripción a Kona, porque el slot irá pasando a los siguientes de la clasificación.
Otra opción es con la opción “IRONMAN Legacy” o sea, terminar un montón de IRONMAN de la franquicia antes, 12 concretamente. Por lo tanto, se debe tener en cuenta que tendrá un coste muy elevado, para el bolsillo y seguramente para la salud.
Hay alguna otra opción como la clasificación por bonus, la subasta benéfica eBay, por aportación benéfica a “Women for Tri” o mediante los sorteos IRONMAN.
Precio
Primero hay un precio para cada IRONMAN, pero suele variar entre 450 y 800€. Pero lo que es el precio para el IRONMAN de Hawaii es de 1000$, porqué te ganas la plaza, pero no la inscripción, y esta se debe pagar insitu en el repartimiento de slots. Eso significa que la cantidad debe estar disponible en la cuenta bancaria, ya que solo se aceptan pagos con tarjeta. Así que se deben tener en cuenta los ahorros, la disponibilidad de pagos en el extranjero, y las cantidades límites de la tarjeta antes de probar de clasificarse.
En el caso de los PRO ya es parecido a los GGEE: va por número de slots en cada competición, no por puntos acumulativos en varios IRONMAN. Así que está también complicado, se debe planificar muy bien la temporada y escoger el IRONMAN que más convenga en todos los aspectos. Si se adquiere la licencia anual PRO, se paga una vez 900$ y ya incluye todas las inscripciones, incluido el mundial de la marca.
Desplazamientos
Vuelos a Kona (KOA)
La recomendación principal es que se compren los vuelos lo antes posible. La opción más económica es la de comprarlos sin conexión, en vuelos separados, pero existe un riesgo con los atrasos o cancelaciones y también el inconveniente de tener que volver a facturar las maletas un@ mism@ y volver a pasar por el arco de seguridad. Nosotros los compramos el 1 de enero y sin conexión y nos costaron 1100€/persona (BCN-LA, LA-KOA), sin contar la maleta de la bici y pudimos escoger asientos en la salida de emergencia para poder mover las piernas. Los vuelos internos entre islas, nos costaron unos 420€/persona (KOA-OGG, OGG-LIH, LIH-KOA), maletas incluidas.
También es importante, si se compran sin conexión, que estén programados con tiempo suficiente para hacer el cambio de vuelo, teniendo en cuenta que la entrada a USA es muuuuy lenta, por los controles de seguridad y de los visados.
Si se va a competir, y se quiere rendir, debemos tener en cuenta el jet lag, es decir, si se vuela desde España, se debería llegar a la isla 8 días antes (Jet lag in athletes, 2012), para adaptarse al cambio horario y regular el ritmo circadiano, además del cambio de temperatura y humedad. Ir unos días antes también ayudará a organizar bien todo el material y estudiar los circuitos.
Transportar la bicicleta
Es difícil alquilar una bici allí, en principio se debe contar con que no habrá disponibilidad, aunque se mire con tiempo, además si se va a competir mejor llevarse la propia. Por eso, es importante reservar billete para ella al comprar los vuelos. Es recomendable protegerla mucho en una buena maleta, más que una caja, y siempre se pueden alquilar si no se dispone de una. Una vez allí, comprobar con tiempo que está todo correcto y hacer una revisión / limpieza de los componentes.
Una vez en la isla
Según si se va acompañado o no, y en función dónde esté el alojamiento. Pero Hawaii es EEUU, y es fácil desplazarse en coche, si se puede, lo recomendaría porque dará libertad para explorar la isla, incluso si se duerme a unos km de la salida, el mismo día se puede aparcar relativamente cerca o algún acompañante te puede acercar lo máximo posible. Si se escoge el coche, no hace falta un 4×4 o “SUV” como recomiendan en algunos sitios, que sea suficiente para las maletas / bici. En todas las islas con un coche normal se llegará a todos los sitios. En el caso de estar pocos días y alojarse muy cerca de la salida / llegada, no haría falta porqué todo el montaje de IRONMAN está muy concentrado, en un radio de 1km.
Alojamiento
Hay varias opciones, pero las mejores se agotan rápido, así que es aconsejable reservar lo antes posible. Hay opción de hotel, apartamento o AirBnB, y en diferentes zonas, más o menos cerca, en la costa o en el otro lado de la AliDrive.
Cuanto más alejado del centro, seguramente menos costará la noche. Y la parte de la montaña también será más económica que en la línea de playa.
Lo que si se debe procurar es saber si se podrá cocinar. Luego extenderé el tema, pero la comida es muy cara allí, y comer en restaurantes aún más, por lo tanto, si tenemos opción de tomar lo que nos apetezca y cuando se quiera, mucho mejor.
Nosotros tuvimos muy buena experiencia en la casa de Megan y Jake, porque teníamos todos los servicios posibles, habitación y baño propio, aparcamiento, cocina y Jake que nos preparaba unos deliciosos desayunos. Pagamos unos 110€/ noche la pareja.
Comida
Hay una mezcla de culturas en Hawaii, también de comidas, así que hay gran variedad de opciones, se puede comer muy bien y sano, pero todo a un precio muy elevado.
Los precios del supermercado (Walmart, Foodland, etc.) son unos 3-4 veces más caros que en España, especialmente los básicos como el arroz o el pan (4-7$/kg), la fruta y la verdura (sobre 10-30$/kg), también los refrescos o cervezas (7-15$/u). En la carne y pescado es donde hay menos diferencias (15-25$/kg).
Comer fuera es aún más caro, claro, además en muchos restaurantes no está incluida la tasa (4%), ni las propinas (15-20%), así que al mirar una carta se deben sumar estos % extras. Hay opciones de comer fuera más económico: los Food-Trucks, te puedes ahorrar algo de propina y los precios suelen ser los definitivos; otra opción son las comidas preparadas que hay en algunos súpers, como en Foodland, donde se puede encontrar comida cocinada a precio de cruda (poke-bowls, macarrones, verduras, ensaladas, bocadillos, …)
Tripadvisor será buena guía para encontrar el tipo de restaurante que se quiere.
¿Qué ver en Kona?
No te lo acabas, y si se ve toda la isla, hay otras muy cerca igual o más especiales.
Si solo se tiene intención de ir una vez, según los días disponibles para vacaciones y el presupuesto, ¡cuantos más días mejor! está muy lejos, es muy bonito y se puede aprovechar el viaje para conocer bien Hawaii.
Días previos
Si se va a competir poco turismo se podrá hacer, pero se puede aprovechar para ver algún rincón sin saturarse, si luego después de competir, hay algunos días más para ello. Además, la propia organización realiza actividades alrededor de boxes, que ya sirven para amenizar las horas previas: la carrera en ropa interior, dejan un carril para la natación en el mar donde fácilmente puedes encontrarte delfines y donde encuentras una plataforma enmedio de la bahía en la que te sirven café; también hay la travesía con clasificación, y muchas otras actividades. Se puede ver el programa los días antes en la zona, sin problema. También hay la feria con material variado, desde el propio merchandising hasta múltiples marcas que ponen su estante.
Día del IRONMAN
¡Si eres competidor/a, poco espectáculo verás, aunque sí lo vivirás! Si IRONMAN ya es bestia en este aspecto, en este triatlón vas a estar rodeado de mucho ambiente, especialmente en la parte central y más cercana a Kona, pero luego sufrirás en las partes más duras y solitarias. Es duro competir en un triatlón LD, pero en este debe serlo aún más: los circuitos son exigentes, hace muchísimo calor (no hay sombras, el suelo quema al ser tan volcánico), humedad y viento. Si vas a competir, recomiendo ir unos días antes a recorrer la zona, entrenar por allí y no descuidar la hidratación ni la nutrición. Al ser circuito largo, sin vueltas, no se coincide mucho con otros competidores ni con los PROS (si eres GGEE), pero antes y después de la salida se puede estar cerca de ellos.
En este aspecto, los acompañantes lo van a vivir aún más, desde fuera se puede ver el espectáculo, especialmente en la carrera a pie: ¡es espectacular ver a tantos triatletas de tanto nivel juntos, en directo y de tan cerca! Aunque también sea duro para el espectador estar bajo el sol tanto rato, ¡es muy emocionante! La parte de la bici casi no se ve, pero en los bares o iglesias ponen pantallas para ver como van en directo, así que se pasa bastante rápido, aunque el sueño ya vaya pasando factura.
Días después
Aquí me voy a extender algo más, porque en cuanto a turismo, hay muchas cosas por ver, según los días que queden de vacaciones. Y si no hay… Pues aprovechad los días previos sin saturarse mucho. Según nuestra experiencia y lo que vimos, destacaría algunos lugares que os cuento a continuación.
Big Island
Playas
Íbamos en busca de delfines, tortugas y relax y para esto, destacaría estas tres.
Kamakahonu Beach
En Kailua, cerca de dónde se hace la natación del IRONMAN (Kailua Bay), hay esta caleta bastante tranquila donde se puede nadar y bucear. La playa es muy buena para los niños y si se entra un poco (600m) se puede coincidir con delfines, no hace falta pagar un barco para que te lleve a verlos.
La bahía de Capitan Cook
Más delfines y casi asegurados estarían en la zona de Capitan Cook, que hay una pequeña bahía donde suelen estar, a 200m de la costa. Se puede aparcar cerca de Manini Beach y estar en una zona verde muy tranquila, con mesas y sombras.
Cerca del aeropuerto
En una zona entre el Aeropuerto de Kona y Kukio, como la Mahaiula Bay, se puede disfrutar de arena blanca y zona de rocas para ver peces y tortugas.
Zonas volcánicas
Hay varias, principalmente Mauna Kea y Mauna Loa. Según el año o el momento se puede ver la lava en vivo, pero en octubre 2019 nos dijeron que estaban secos y parte de arriba estaba cerrado. Así que solo visitamos la parte más baja del Mauna Loa y era curioso, desde el centro de visitantes del Parque Nacional de Volcanes se puede andar por un camino marcado (unos 2-3km) y ver las chimeneas, oler los gases volcánicos y ver el cráter desde el mirador.
Zonas verdes
No nos dio tiempo a explorar la parte más húmeda de la isla, porqué sabíamos que también encontraríamos en Maui o Kauai, pero si se puede, seguro que toda la parte este de la Isla (Reserva Forestal de Waiakea o la de Hakalau) es muy bonita en cuanto a vegetación y ríos.
Luego, si hay más tiempo, se puede saltar a otras islas. Nosotros escogimos Maui y Kauai. Evitamos Honolulu por la masificación, pero cada uno debe valorar lo que prefiere.
Así que nos despedimos de los triatletas y seguimos con el viaje.
Maui
Es una isla con una temperatura más agradable, mucha variedad de naturaleza, pocas carreteras, no está muy-muy masificada, pero sí con muchos resorts y casas de gente con poder adquisitivo (norte-americanos la mayoría). Nosotros escogimos un alojamiento con cocina (por el tema de las comidas) en la parte Kihei – Wailea, por la ubicación y opciones de desplazamientos.
Playas
Son bonitas la mayoría de las playas cerca de Makena, pero se debe ir con mucho cuidado con las olas y corrientes, si hay surferos mejor no meterse, y buscar las que tengan socorrista o que las que sean muy planas.
Zona volcánica
El volcán de Healelaka es imprescindible. Si se quiere ir a ver el amanecer desde los 3.000m, se debe reservar previamente la entrada e ir con tiempo para aparcar y coger sitio. Es necesario llevar ropa de abrigo (pantalón largo y anorak). Es muy bonito y se puede observar todo el cráter con otros pequeños dentro de este, y también el mar de lava seco. Luego desde allí se puede hacer un buen paseo, con algunas variantes – circuitos que proponen. Aunque los americanos lo tienen muy marcado y existe un camino principal para que no salgas del “trail”, nosotros nos fuimos a dar una vuelta campo a través para pasear encima del río de lava y subir a un pequeño cráter.
Zonas verdes
Hay muchas también, toda la parte noroeste es muy verde, con opciones de hacer excursiones como el “Waihee Ridge Trail”.
Encontramos una casa (Lorraine Shave Ice) donde vendían pan de plátano y tenían frutas locales. Y luego cerca de la carretera podías ver algunos “blow hole”.
Y toda la parte este también, hay un contraste muy fuerte delimitado por el volcán. Toda la carretera que lo rodea es recomendable, y también parar en algunos puntos para ver las cascadas o dar algún paseo. Está todo marcado porque la ruta “Road to Hana” es muy turística. Si se va con tiempo, está muy bien hacer toda la vuelta, acabando en Kaupo, porqué se podrá ver variedad de paisajes, de más húmedo y verde hasta lo más seco y volcánico. También se puede comer bastante bien, local y a precio asequible.
Kauai
Es la isla más antigua, la más verde, y más virgen debido al terreno, que tampoco facilita su explotación ni acceso. La carretera principal pasa bordeando la costa, sin llegar a dar la vuelta a la isla, que es dónde hay los resorts para alojarse.
Estuvimos en un hotel cerca de Kapaa, un pueblo con todos los servicios y bien situado para desplazarnos tanto por el norte como el sur de la isla.
Playas
Se debe vigilar con el oleaje, como en las otras islas, esta vez fuimos directos a playas tranquilas. Para ir con niños, darse un baño o hacer esnórquel, ver tortugas, peces e incluso focas hawaianas, son ideales la Anini Beach (tortugas) y Poipu Beach (focas, tortugas, peces).
Zonas verdes
¡Todo es verde! Pero para hacer excursiones hay mucha variedad, especialmente en la zona de Waimea Canyon. También hay una excursión espectacular, el Kalalau Trail o la visita a Hanakapi’ai falls (variante del Kalalau).
Para entrar al Waimea no se necesita nada, y en toda la carretera hay diferentes zonas de aparcamiento (de pago) y excursiones señalizadas.
Pero para recorrer el Kalalau hay dos opciones a escoger: la versión larga que son 17km ida + 17 vuelta y que se necesita un permiso de pernoctación., o bien, la excursión corta para ver la cascada que para ello hay que reservar la entrada. Y para reservar esta entrada, hay dos opciones más: llegar al punto de inicio con nuestro propio vehículo (esta opción tiene un coste inferior pero se debe reservar con antelación, hay pocas plazas de reserva) o con un bus lanzadera que sale desde Princeville y llega hasta la playa Ke’e Beach que es el inicio del Kalalau. Esta última opción es más cómoda y hay más plazas disponibles. Encontrarás más información y todas las opciones de reserva en su web.
En cualquier caso, es importante llevarse un buen calzado y agua, es muy húmedo y caluroso.
Otras actividades
Seguro que hay muchas más actividades pensadas para turistas, pero para nosotros era un viaje especial, diferente y seguramente irrepetible, así que nos gastamos los últimos ahorros en algunas actividades típicas:
- Kayak por el río + tramo andando para llegar a una cascada, a través de Alii Kayaks.
- Ver la costa menos accesible con una lancha y pudimos ver muchísimos delfines, cuevas, y la costa desde otra perspectiva. El esnórquel no valió la pena, pero lo demás estuvo divertido y bonito.
- Visita de la isla desde el aire, en helicóptero. Estas excursiones se pueden reservar por internet o una vez allí, nosotros improvisamos y lo contratamos con descuento en Princeville. Según lo que te quieras gastar, hay diferentes opciones: sin o con puertas. Las opiniones sitúan a los de Jack Harter como los mejores. Nosotros cogimos algo económico y también valió la pena, porque se puede ver y entrar dentro de zonas que no se verían si no fuera así, son muy escarpadas e inaccesibles, infinidad de cascadas, zonas volcánicas, verdes o campos.
¿Merece la pena?
Siempre dependerá de las expectativas de cada un@, pero sin duda, es un lugar especial, con variedad de paisajes y fauna marina.
Se conserva bastante la parte natural, también algunos nativos y originarios de la isla, pero es cierto que los estadounidenses han impuesto su cultura y llenado de gente con alto poder adquisitivo. Les ha traído más turistas, generado trabajo, pero también han aumentado el coste de la vida y explotado el terreno con lo que les ha interesado.
La parte positiva es que es una zona muy segura (por la gente, sin animales peligrosos o enfermedades), con todos los servicios y comodidades, que a menudo parecen excesivas porque está todo muy marcado y preparado para que todos hagan lo mismo y casi sin bajarse del coche.
Como turista, los mayores inconvenientes son las horas de vuelo (desde Barcelona) + la escala; y el coste del viaje, por el cúmulo de todo (desplazamiento + comida + alojamientos caros).
Sin duda, para nosotros, como triatletas y recién casados, ¡valió la pena!